lunes, noviembre 26

Manzanos, Javier.

Texto para la instalación en el Campus de la Universidad Pública de Navarra.
Enero 2002


Instalación


Miguel Pueyo nos propone una intervención que explora los límites entre lo natural y lo manufacturado, a la vez que se adentra en el análisis del espacio público, su presencia exterior y su vida interior.

De sus esculturas, aquellas metáforas de sus túneles posmodernos, donde no cabe la mirada atrás sin verse asaltado por una nueva influencia, de la pulcritud de las luces de neón, los espejos y los artefactos tecnológicos, Miguel nos sorprende con una obra que se doblará, mojará, ensuciará…, cobrará vida durante su estancia en el campus.

Las mangueras industriales, que actúan como algo orgánico, lombrices o enredaderas de lento, casi imperceptible movimiento, conectan, desde sus límites, el espacio natural, abierto, y el espacio humano, edificado.

No sabemos bien quién se alimenta de quién, los tentáculos-manguera parecen recomponer su ramificado cuerpo desde diferentes departamentos del saber universitario para, unidos, penetrar en el interior de la tierra, conectando a ambos en una relación parasitaria, como organismos vegetales o animales que viven a costa de otro de distinta especie, alimentándose de sus sustancias y depauperándolo sin llegar a matarlo.

Su presencia, su movimiento y su mensaje, no dejan de ser amenazantes.